Se pueden colocar sobre cualquier tipo de superficie, siempre y cuando sea firme, seca, y estar bien nivelada. Hasta admite un cierto grado de irregularidades, las que son compensadas por la manta de poliestireno de 2mm que se coloca siempre como bajo piso. Se pueden colocar sobre carpeta, mosaicos, cerámicas, maderas o vinilos. No se recomienda colocar sobre alfombras. En estos casos se deberán quitar, para colocarlos sobre las carpetas en forma directa.

Se colocan sin clavar, atornillar ni pegar al suelo. Solo van apoyados sobre una manta de poliestireno, y encolados entre sí en los machimbres de costado y cabeza. También es recomendable colocar bajo esta manta, un polietileno de 200 micrones que funciona como una aislación hidrófuga (antihumedad).

El suelo donde se coloca deberá reunir los mismos requisitos que para colocar un piso de madera, o sea que la carpeta no deberá tener una humedad superior al 2%, medida con higrómetro electrónico.

Las ventajas de estos pisos, además de su belleza natural, es que son también de muy buena resistencia a la abrasión. No es recomendable la colocación de estos pisos en lugares donde puedan ser afectados por humedad, como saunas, baños, cocinas y espacios semicubiertos.

Para la colocación es aconsejable colocar las tablas en el mismo sentido en el que entra la luz al ambiente, así como también hacer coincidir el largo de la tabla, en forma paralela al largo máximo del ambiente.